domingo, septiembre 28, 2008

Y ahora ya pasó el verano


Todos los días entro en mi blog y en los de los amigos pero desde julio no escribo. No encuentro tema y no consigo que en mi cabeza aparecen palabras que lleguen a mis dedos.


Ha pasado el verano. Uno más, sin muchas novedades. A principios de septiembre estuve una semana en Galicia con mis padres. Mi madre no conduce y mi padre no puede conducir tantos kilómetros. Queríamos ir los tres (mi adolescente favorito trabajaba) y buscamos un hotel.

Ha sido bueno porque, entre otras cosas, mi padre ha estado mejor de lo que pensaba y el tiempo también ha sido mejor de lo que esperábamos: salimos de Madrid con un diluvio y las previsiones no eran muy buenas, pero no se cumplieron.

El resto, más bien un desastre.

Descansar físicamente, he descansado, pero... no estoy contenta.

Debe ser el estar ociosa y no buscar alternativas.

Las vacaciones terminan hoy y mañana vuelta a la rutina del trabajo. A ver que me encuentro porque estoy casi segura de que mi jefe ha dejado marrones que no ha resuelto o querido resolver, esperando mi vuelta. Lo que él intenta es "mojarse" menos echándome a mí a los "leones". Y es que, además, lo ha reconocido.

Este año, no tengo ni curso, ni nada, a ver si me organizo y puedo encontrar algo que consiga despejar mi cabeza que está un poco "rara", por decirlo de alguna manera. Eso sí, vuelvo al gimnasio, no es que haga mucho más que pilates, de momento, pero así me mantendré un poco.

Soy un poco desastre en algunas de mis cosas.

En fin... no aprenderé nunca a ocuparme más de mí.